Después de años, al fin se me ocurrió un nombre para éste blog; no estoy seguro de saber si es un buen o un mal nombre, pero ya era justo bautizarlo y "nosemeocurriounbuennombre" era el principio de una url muy compleja, creo.
Ahora la dirección para acceder a este, mi humildísimo blog, es "elhumildisimoblog.blogspot.mx", aunque si están leyendo esto, seguro ya lo habían descubierto.
Otro cambio importante es que ya dejó de ser "la vida de un débil mortal" y pasó a ser oficialmente mi humildísimo blog, como me gusta decirle a éste espacio que se ha llenado gracias a desvelos, cafeína y una que otra chaqueta mental.
Si son observadores, se darán cuenta que parte del párrafo anterior está en la descripción del blog, debajo del título. Hoy también fue el día de ponerle descripción, como un regalo por siempre estar disponible para los tecleos de mis madrugadas insomnes. Gracias, humildísimo blog.
Y no, no es que haya dejado de ser un débil mortal. Tal vez nunca lo fui, o tal vez siempre lo seré y hay que aprender a vivir con eso, como se aprende a ser zurdo y batallar con las tijeras. (Además se lee más padre el nuevo título, creo)
Finalmente y esta vez sí menos importante: cambié la plantilla.
Ahora creo que se ve más sobrio, pero... ¡Tiene granitos de café! Y me gusta el café y, casi siempre, una taza de esa bebida me acompaña en los desvelos.
Ahora creo que se ve más sobrio, pero... ¡Tiene granitos de café! Y me gusta el café y, casi siempre, una taza de esa bebida me acompaña en los desvelos.
Digo que ese es el cambio menos importante, porque seguramente se modificará en unos meses, semanas, días... horas. No sé, pero seguro será antes que volver a cambiar el nombre y la URL.
Lamento decepcionar si pensaron que leerían algo importante en esta "entrada" (sigo odiando decirle entra a los textos, pero a todo se acostumbra uno), pero para que no sientan que les he robado valiosos minutos de su tiempo, les regalo una canción:
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